En un clásico capitalino muy caliente y difícil de jugar, Millonarios empató a un gol con Santa Fe, rival que ya estaba eliminado y no había sumado puntos en los cuadrangulares hasta este partido. El Embajador no mostró su mejor versión y aunque el resultado lo deja dependiendo de sí mismo, perdió la chance de clasificar con un empate en Pasto y lo condicionó a ganar o esperar que Nacional no gane.
Esta vez Alberto Gamero alineó un 4-4-2 rara vez empleado en su sistema táctico inicial. Ante más de 30 mil espectadores, el clásico inició a todo ritmo con llegadas para ambos bandos. Millonarios fue el primero quien avisó con Leonardo Castro quien estuvo activo durante los 90 minutos.
Durante los primeros 15’, Millonarios fue quien propuso e intentó hacerle daño a Mosquera Marmolejo con remates de Leo y Cataño. Para impedir estos “sacudones” del Embajador, el rival recurrió al juego brusco y por ende su primer amonestado antes del primer cuarto de tiempo.
El ritmo del partido era muy exigente y también de mucho choque. Millonarios aprovechó un tiro libre que ejecutó Falcao y tras una serie de rebotes el mismo “Tigre” logró concretar el gol. En primera instancia el línea levantó la bandera por un posible offside que terminó anulando el VAR. Así Millonarios conseguía el primer gol del partido.
El equipo de Gamero entendía que debía seguir atacando y a los 22’ Cataño tuvo un mano a mano que Mosquera Marmolejo atajó, luego de una gran combinación de pases entre “Macka” y Leo. Millonarios insistió con Andrés Llinás que tuvo un cabezazo que atajó el portero rival.
Santa Fe reaccionó en los últimos minutos del primer tiempo e hizo ver incómodo a Millonarios. A partir de este momento el rival empieza a llegar más fácil y tuvo opciones con Hugo Rodallega y Edwar López.
El segundo tiempo Gamero reemplaza a Falcao por Jhon Córdoba, debido a una carga muscular, según declaraciones en rueda de prensa. El equipo regresa a su tradicional 4-2-3-1, sin embargo se empiezan a dejar más espacios y antes de los primeros 5 minutos Rodallega marca el empate luego de un rebote que Montero soltó.
Luego de este gol el encuentro sube de tono y empiezan las faltas, choques, roces y fricciones en cada jugada disputada. Millonarios intentó de media distancia con Cataño pero no generaba peligro en sus acciones ofensivas.
En los últimos 20 minutos se jugó muy poco fútbol y se perdió demasiado tiempo. El rival empezó a jugar con la necesidad de Millonarios y frenó en más de tres ocasiones el partido para recibir atención médica.
El partido terminó muy caliente y hubo algunos encontronazos luego del pitido final. En una instancia donde hay que tener efectividad, Millonarios no concretó las que tuvo y aplazó la definición del cuadrangular para la última fecha.
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